Tejetintas

Soy un continente que contiene mil países. Tienen capital en cada uno de mis triunfos, fracasos y esperas. Los conectan carreteras hechas de tiempo y cambio. Todas nacen en alguna parte de mí. Todas terminan en mi corazón.

Soy un continente que a veces se siente mundo. Y ve salir el sol y cree que es sólo por él. Pero el sol sale por y para todos, aunque no siempre al mismo tiempo. En el mismo instante en este mismo mundo, hay quien ve nubes, hay quien ve estrellas y hay quien lo ve todo azul.

Soy un continente. Uno en el que siempre amanece. Las noches son soleadas y algunos días se ven estrellas. Y hay fuentes a cada paso. Y hay tormentas que son refugios. Y cuevas para mostrarme al mundo.

Soy un continente con gobierno en el pecho y la frente. Con leyes de amor y castigos de perdón y olvido.

Soy mil países y cien mil ciudades. Cada barrio una emoción constante que se apaga y se enciende. Que ya estuvo y que volverá. Todas son yo. Yo soy todas ellas.

Soy un continente de países con ciudades con pájaros, niños y parques. Gatos callejeros y gente buena. Y gente mala que nunca gana, que no consiguen lo que quieren. Y laberintos en los que disfruto perdiéndome, porque lo mejor de perder siempre es encontrar.

Soy cien mil ciudades con casas de luz encendida. Y olor a bienvenida y a «quédate siempre» (o un rato).

Soy un continente que para algunos continentes próximos es o alguna vez fue planeta. La gravedad nos une, y si nos unió, fue la libertad quien nos separó.

Soy un continente pero no soy nada sin mi universo. Sin mi cosmos de personas galácticas, de besos-órbita, de caos y orden. De sueño, de cafés, de libros, de tiempos muertos. De melodías, de brindis, de excusas para ser feliz.

Soy un continente que quiere ser contenido. Que ve crecer las flores en una tierra que sólo la verdad hace fértil.

Soy un continente con un mapa de huellas en la piel y en la conciencia. Tengo un horizonte infinito que se vuelve vertical si me mareo. Que me recuerda que nunca es tarde para pensar que algo que tiene que pasar, va a pasar.

Soy sólo eso, un continente con un principio y mil finales.